Ponemos los garbanzos a remojo desde la noche anterior (este paso no es necesario si elegís la opción de garbanzos de bote).
Los ponemos a cocer con agua y sal.
Mezclamos las especias en polvo en una taza con un poquito de agua. Este paso nos sirve para que no se quemen las especias cuando las añadamos al aceite.
Ponemos al fuego una olla pequeña con aceite. Cuando este caliente añadimos comino en grano. Cuando empiecen a tostar añadimos la cebolla cortada en juliana.
Cuando la cebolla va cogiendo color, incorporamos pasta de ajo y jengibre y freímos unos segundos. Añadimos la mezcla de las especias en polvo y seguimos sofriendo unos cuantos minutos hasta que veamos que las especias se están separando del aceite.
Añadimos los garbanzos cocidos y la sal. Rehogamos todo junto durante un par de minutos. Echamos las patatas cortadas en dados y los tomates. Removemos todo muy bien y añadimos un poquito de agua (como media taza). Tapamos la olla y cocemos todo durante cinco-seis minutos hasta que el agua se absorba.
Apagamos el fuego y destapamos la olla. Espolvoreamos cilantro fresco y volvemos a tapar. Dejamos unos minutos para que el aroma del cilantro penetre en el guiso.
Añadimos un chorro de zumo de lima por encima justo antes de servir (Este paso es opcional) con chapati o pan.