Ponemos en un recipiente agua templada con sal. Cortamos el Paneer en dados y los dejamos sumergidos en esta agua.
Lavamos muy bien las hojas de espinacas y quitamos los tallos gruesos.
Calentamos el aceite en un recipiente amplio a fuego medio alto. Añadimos la mitad de ajo picado y la guindilla verde picada.
Los doramos ligeramente, agregamos la cebolla y jengibre rallado. Cocinamos hasta que la cebolla esté dorada.
Añadimos las hojas de espinacas y la sal. Tapamos el recipiente y cocinamos las espinacas unos 3 minutos hasta que estén blandas y hayan soltado el agua.
Retiramos del fuego y dejamos que se enfríen un poquito antes de triturarlas.
En una batidora ponemos las espinacas cocidas con todo su jugo. Trituramos y reservamos para luego.
Ponemos una sartén al fuego medio. Fundimos la mantequilla y añadimos comino en grano. Cuando empiecen a crepitar agregamos los restos de ajo picado.
Freímos unos segundos, añadimos los tomates, Garam Masala, cilantro en polvo y una pizca de sal. Sofreímos unos segundos hasta que los tomates estén blandos.
Incorporamos la espinaca triturada y removemos todo muy bien. Cuando empiece a dar un suave hervor apagamos el fuego y agregamos la nata y los trozos de Paneer.
Removemos con cuidado para que los trozos de Paneer se mezclen con la crema y servimos enseguida con pan Naan, roti o arroz Basmati.